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Desarrollo económico y cuidado del entorno no son dos conceptos antagónicos, ni mucho menos. De hecho, en la industria, en la agricultura, el comercio y en general en todo tipo de actividades económicas se están dando grandes pasos para unirlos. Ser verde no solamente está de moda, sino que está generando beneficios. Y un entorno como el del transporte marítimo no permanece indiferente. De ahí la aparición del llamado Puerto Verde o Green Port, por su denominación en inglés.

Comencemos por el principio: ¿qué es un puerto verde?  Es «aquel que desempeña su actividad teniendo en cuenta no solo el ámbito económico, sino también el medio ambiental y el social, es decir, de modo sostenible, realizando su actividad causando el mínimo impacto, aportando medidas de mejora y control de calidad de aire, agua, ruidos y residuos. Al mismo tiempo, un Puerto Verde o Green Port es aquel que entre sus características puede ofrecer suministro eléctrico desde tierra a los barcos (OPS —que viene de On-Shore Power Supply, por su nombre en inglés—), incluyendo instalaciones de energía renovables y medidas de eficiencia energética». Esta es la definición exacta a la que llegaron, de forma consensuada, los más de 150 expertos de 11 países que debatieron en Vigo sobre el camino hacia la consecución de un Puerto Verde, en el marco de la I edición de la Green Energy Ports Conference, promovida por la Autoridad Portuaria de Vigo, en julio de 2013.

La idea de un Puerto Verde o Green Port está, como se ve ya desde su definición, altamente ligada al concepto de desarrollo sostenible, ya sea en el ámbito social, el económico y el medioambiental. ¿Qué quiere decir esto? Que se realice una actividad que sea capaz de responder a las necesidades presentes, sin comprometer la satisfacción de las necesidades de próximas generaciones. Es decir, se pretende reducir costes efectuando una actividad que cause el mínimo impacto y ejecutando a su vez, medidas de mejora y control en la calidad del agua, aire, ruidos y residuos.

De la importancia que tiene la sostenibilidad es ejemplo la Guía de gestión energética en puertos, de Puertos del Estado, que la describe como «uno de los principios que deben regir el modelo de planificación y de gestión de los puertos». La finalidad de esta guía es contribuir a mejorar la competitividad de los puertos, reduciendo los costes de gestión energética y realizando un uso más eficiente de la energía. Y, en segundo lugar, impulsar la sostenibilidad ambiental del transporte marítimo, reduciendo las emisiones contaminantes ligadas al uso de la energía en los puertos.

Medidas

¿Cómo se consigue? Según los expertos reunidos en Vigo, algunas medidas son implantar gas natural a los buques y sistemas de suministro eléctrico, para que los barcos pueden apagar los motores al atracar, reduciendo así las emisiones de azufres y gases de efecto invernadero. De hecho, estimaban en más del 30% la reducción de estas emisiones, e incluso —para algunos casos— acercarlo al objetivo 0. Además de los sistemas OPS, el empleo de scrubbers, barcos eléctricos o los navíos con motores de gas natural licuado también son medidas que pueden ayudar a disminuir estas sustancias contaminantes.

El espejo donde mirarse lo fijaban en el norte de Europa, donde las leyes obligan a los puertos a reducir sus emisiones nocivas, y donde ya se han desarrollado este tipo de medidas. Además, desde año 2001, la Unión Europea cuenta con una Estrategia de desarrollo Sostenible donde se pretende constituir un marco a largo plazo para la sostenibilidad y potenciamiento del crecimiento económico, la cohesión social y la protección del medio ambiente. En esta guía se dedica un capítulo a “El transporte sostenible: más fácil, más limpio y más seguro”.

Puertos Verdes en España

Desde el 1 de enero de 2013 en España se lleva a la práctica la normativa de residuos MARPOL a buques, que ha conseguido el incremento de la recogida de estos residuos. Y es que se paga por el hecho de entregar el residuo y no por el volumen, por lo que todos los buques entregan el residuo en puerto. Además, esta normativa también se refiere a la prohibición de arrojar basuras al mar y se exponen los requisitos para su descarga. Asimismo, la Ley de Puertos obliga a elaborar Memorias de Sostenibilidad de todas las terminales de España y su entrega a Puertos del Estado. Son medidas que, según los expertos, situaban a España como referente legislativo.

Los puertos de Valencia, Vigo y Castellón tienen en su haber el reconocimiento como Puertos Verdes. A modo de ejemplo, en el puerto de Valencia, toda su actividad está regulada por la Política Ambiental de la Autoridad Portuaria de Valencia, que recoge los principios ambientales generales y de mejora continua para que la actividad del puerto sea respetuosa con el entorno. Así, se llevan a cabo actuaciones para la mejora de la calidad de las aguas, del aire, de la acústica, la prevención y lucha contra los vertidos, la adecuación de dragados y la gestión de residuos.

Prosertek apuesta por esta idea del Puerto Verde, para lo cual optimiza sus equipos y propone soluciones que reducen el consumo, manteniendo la operatividad. Además, hemos desarrollado un sistema de ayuda al atraque, un sistema que constituye una herramienta fundamental para la optimización de la operativa y que, en consecuencia, facilita el desarrollo sostenible de los puertos.

En varios de los Puertos Verdes antes mencionados están a pleno rendimiento productos de Prosertek. Como referencias más recientes, los ganchos de escape, los sistemas de ayuda al atraque y las pasarelas telescópicas en Castellón. Y otro de los equipamientos portuarios en los que estamos especializados, los bolardos, se encuentra en el puerto de Valencia.