Equipamiento portuario para terminales GNL (II): hacia un cambio de regulación

Continuamos con nuestra serie de artículos en torno al equipamiento portuario para terminales GNL. En la anterior entrega ya hablamos de las características básicas del GNL y del importante aunque desconocido papel que los equipos tienen dentro de una terminal. A continuación, vamos a ir desgranando los pormenores del equipamiento necesario para una plataforma GNL.

Hacia un cambio de mentalidad y de regulación

La regulación existente, o más bien la ausencia de ella, es, como decíamos, una de las causas que permiten la existencia de terminales GNL aún pobremente equipadas. Esto sucede porque pese a existir normas y recomendaciones, no profundizan en el producto ni realizan una clasificación exhaustiva.

No obstante, algunas consultorías, constructoras, autoridades y fabricantes, están intentando concienciar en la mejora de la seguridad y la operatividad. El ejemplo más ilustrativo es la reciente creación del grupo de trabajo CIP-GT06 (Integración de equipos marítimos orientados al atraque y estancia de buques en muelles), por el Comité Técnico de Ingeniería Portuaria de la Asociación Técnica de Puertos y Costas (ATCYP), cuya finalidad es editar directrices prácticas en las que los diseñadores puedan apoyarse para proyectar unas instalaciones de atraque adecuadas y seguras.

Pasos como éste apuntan a un cambio de mentalidad y criterio por parte de las ingenierías y responsables de dotar a las terminales marítimas, y en particular a las de GNL, de equipos y sistemas orientados al atraque para garantizar estándares de seguridad. Y es que, aunque el coste económico de instalar equipos marítimos de calidad parezca elevado, lo realmente caro en términos de utilidad y seguridad es no hacerlo.

Entre los sistemas y equipos que estamos hablando se encuentran los siguientes:

Sistemas de monitorización para ayuda al atraque
Sistemas de defensas portuarias
Sistemas de amarre a base de bolardos y ganchos de escape rápido
Pasarelas de acceso autopropulsadas

Una configuración del equipo para cada plataforma

Para saber qué tipo de equipos y sistemas portuarios necesita cada terminal, así como su disposición, es necesario un previo estudio de compatibilidad en el que, además de verificar los accesos náuticos, se realice una comprobación de la viabilidad de las operaciones de entrada, atraque, descarga, desatraque y salida del buque en puerto y terminal desde el punto de vista geométrico. Esto incluye atención a elementos tales como:

Prestaciones y rangos de los equipos de los sistemas de ayuda atraque.
Características y disposición de los sistemas de defensa.
Características y disposición de los sistemas de amarre.
Características y envolvente de trabajo de la pasarela de acceso.

El citado estudio también debe considerar aspectos medioambientales como vientos y oleaje. Y es que el buque, pese a estar atracado, puede moverse según seis grados de libertad, tres de traslación (vaivén, deriva y alteada) y tres de rotación (balanceo, cabezada y guiñada). También hay que evaluar si están expuestos a atmósferas explosivas o no y con qué clasificación, así como los grados de protección al polvo y agua.

Todos estos datos determinarán el número de equipos necesarios, los rangos operativos, capacidades, características, distribución, etc., haciendo estos elementos de la terminal compatibles con el entorno, la geometría y los requerimientos del buque para garantizar el desarrollo de las operaciones en condiciones de seguridad.

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